Efectos de los Productos Químicos de Limpieza en la Vida Útil de los Rodillos

La limpieza de la superficie de trabajo de un rodillo es un aspecto fundamental del mantenimiento de la maquinaria industrial. Sin embargo, los métodos y la química de limpieza a menudo se pasan por alto. Todos sabemos que un rodillo limpio produce materiales de mayor calidad y genera menos desechos, pero ¿sabía que algunos productos químicos y disolventes de limpieza pueden causar más daño que beneficio?

Incluso con un período de contacto relativamente corto, los productos químicos y disolventes incompatibles pueden provocar daños irreparables en el revestimiento de un rodillo. Los efectos adversos a largo plazo suelen pasar desapercibidos, ya que los cambios no siempre son rápidos ni evidentes. Un limpiador que es eficaz para eliminar residuos no siempre es seguro para la goma, el revestimiento de plasma, el cromado u otros materiales del rodillo.

Los daños obvios, como el desgaste o la degradación rápida, se detectan rápidamente. Sin embargo, los cambios menos evidentes, como alteraciones en la dureza (durómetro), cambios dimensionales, variaciones en las propiedades de rebote y mayor adherencia, pueden surgir después de un uso prolongado. Identificar la causa raíz de estos síntomas puede ser un proceso complejo y costoso que afecta la eficiencia de las líneas de producción.

Conocer qué productos químicos son seguros para usar con los revestimientos de sus rodillos es crucial para maximizar la vida útil del recubrimiento y mantener la eficiencia operativa a largo plazo. Es posible que los productos químicos y solventes aprobados para recubrimientos utilizados hace años ya no sean compatibles con los materiales actuales.

Históricamente, las cubiertas de rodillos de nitrilo se limpiaban con queroseno desodorizado, que eliminaba eficazmente la acumulación sin dañar el caucho de nitrilo. Sin embargo, al cambiar la cubierta del rodillo a EPDM, los métodos de limpieza no se actualizaron y se siguió utilizando queroseno desodorizado. Aunque el EPDM no se deteriora rápidamente al contacto con el queroseno, este se absorbe fácilmente, causando hinchazón y cambios dimensionales.

Este aumento de volumen está directamente asociado con una disminución de la dureza y puede provocar ondulaciones y otros cambios indeseados en el perfil de la cara de trabajo del rodillo. Como el queroseno desodorizado no se desgasifica fácilmente a temperatura ambiente, estos cambios en el EPDM son acumulativos y permanentes. Aunque se haya notado que los revestimientos de EPDM no duran tanto como los de nitrilo, el problema radica en el uso de un limpiador incompatible.

Es crucial consultar con el fabricante de sus rodillos o con expertos en recubrimientos para obtener recomendaciones específicas sobre productos de limpieza compatibles.

Se recomienda revisar y actualizar los métodos de limpieza al menos una vez al año o cuando se introduzcan nuevos recubrimientos en sus rodillos.

Los signos de daños químicos incluyen cambios en la dureza, variaciones dimensionales, aumento de adherencia y alteraciones en las propiedades de rebote. Una inspección regular puede ayudar a identificar estos problemas temprano.

Deje de usar el producto químico inmediatamente y consulte con un especialista en recubrimientos para evaluar los daños y determinar el mejor curso de acción.

Al comprender y mitigar los efectos de los productos químicos de limpieza en sus rodillos, puede asegurar una mayor eficiencia operativa y prolongar la vida útil de sus equipos, contribuyendo así al éxito a largo plazo de sus procesos industriales.



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